Dentro
de una caja no cabe ni la mitad de lo que he encontrado
y
esto se acaba.
Justo
ahora que los días son más largos
me
he propuesto menos tareas que en todo el año,
aún
así los cebos están en el agua,
como
todo lo dulce.
No
sé qué espero de aquí
no
sé si hay que esperar algo.
El
vivir viene lento para poder absorberlo
el
último tiempo es sereno,
como
mi alma.
porque
siempre he creído que faltaba algo:
hoy
los años lo dicen,
faltaba
corazón.
Los muros han caído tan lentos como fue necesario.